hola amigos les traigo la historia de herobrine una historia muy buena para los seguidores y fanáticos de minecraft yo creo que la historia es la mejor creepypasta que e oído acerca de minecraft espero que les guste y nos vemos mañana con el vídeo.
Recientemente "Spawnee" en un nuevo mundo single player de Minecraft. Todo era normal al principio, así que comencé a talar arboles y a crear items en mi cajita para crear items (Workbench). Me di cuenta que algo se movía en la densa niebla (Tengo un computador muy lento, así que tengo que jugar con una pequeña "Render Distance" (Mientras mas baja esta opción, menos ves a tu alrededor, más niebla). Pensé que era una vaca, así que la perseguí, esperando poder tomar algo de cuero para la armadura.
No era una vaca. Mirándome estaba otro personaje con el skin default, pero sus ojos estaban vacíos. No vi pop-up con su nombre (o sea, el nombre que sale arriba de uno cuando juegas en línea), y doble chequee para asegurarme que NO estaba en el modo multiplayer. El no se quedo mucho tiempo, me miro y rápidamente corrió hacia la niebla. Lo perseguí por curiosidad, pero ya se había ido.
Continué con el juego, no seguro de que pensar. Mientras me expandía por el mundo vi algunas cosas fuera de lugar para lo que un "Random Map" (Mapa al azar, el juego te crea mapas al azar en cada partida) pudiese hacer. Túneles de 2x2 en las rocas, pequeñas pirámides perfectas hechas de arena en el océano y arboledas de arboles con todas sus hojas cortadas. Yo constantemente pensaba que había visto al otro "jugador" en la profunda niebla, pero nunca tuve otra buena vista de el. Intenté incrementar mi "render distance" pensando que podría ver, pero fue en vano.
Guarde el mapa y me fui a los foros para ver si alguien más había encontrado a este "Pseudo-jugador". No había nadie. Cree mi propio tema contando sobre el hombre y preguntando si alguien había tenido una experiencia similar. El post fue borrado antes de los cinco minutos. Intente otra vez, y el tema fue borrado aún más rápido. Recibí un PM de un usuario llamado "Herobrine" que contenía una palabra: "Detente". Cuando quise mirar el perfil de "Herobrine", la pagina era 404 (Típico error 404, pagina no encontrada).
Recibi un email de otro usuario del foro. El dijo que los moderadores pueden leer los mensajes de los usuarios en el foro, así que estábamos seguros usando email. Este usuario decía que el había visto al misterioso jugador también, y tenia un pequeño "directorio" de otros usuarios que decían haberlo visto también. Sus mundos estaban llenos con obvias construcciones "hechas por hombres" también, y describían que el misterioso jugador no tenia pupilas.
Cerca de un mes paso hasta que oí noticias de mi informante también. Algunos jugadores que se han encontrado al hombre misterioso echaron una mirada al nombre "Herobrine" y encontraron que ese nombre era usado frecuentemente por un jugador sueco. Después de recopilar más información, descubrimos que era que el hermano de Notch, el desarrollador del juego. Personalmente le envié un mail a Notch, y le pregunte si el tenia un hermano. Tomo un tiempo, pero el me respondió de vuelta con un mensaje muy corto:
"Tenia, pero el ya no está con nosotros"
- Notch.
Terror de creepypastas
jueves, 12 de diciembre de 2013
sábado, 7 de diciembre de 2013
Hola amigos como están les traigo la historia de Eyeless Jack espero que les guste mucho porque creo que tiene lo necesario esta historia de todos modos voy a dejarles un vídeo de la historia el viernes un abraso y espero que lo disfruten asta mañana amigos a qui les dejo la historia :)
Hola. Mi nombre es Mitch. Estoy aquí para contarles a ustedes acerca de una experiencia que tuve sobre los fenómenos sobrenaturales esos que la gente cuenta, yo no me creía esas pamplinas, hasta que un día eso… me visitó, y a partir de ahora si me creo toda esa basura paranormal.
Una semana después me fui a vivir con mi hermano, Edwin. Después de que mi casa fuera a ser embargada, terminé de desempaquetar. A Edwin le gustaba la idea de mi mudanza, ya que no nos habíamos visto desde hace 10 años, así que estaba muy emocionado. Pronto me quedé dormido y al día siguiente me mudé.
Después de la primera semana, oí ruidos susurrantes que venían de fuera a la una de la mañana. Me pareció que era un mapache, por lo que no hice caso y traté de conciliar el sueño. A la mañana siguiente, le hable a Edwin sobre lo que vi, y él estuvo de acuerdoLa noche siguiente, sin embargo, me pareció oír mi ventana abrirse de un fuerte golpe, como si algo hubiera entrado en mi habitación. Miré hacia arriba y alrededor de mi habitación, pero no vi nada.
A la mañana siguiente, Edwin tiró la taza de café al suelo cuando me vio. Luego me acerco un espejo para poder verme.Tenía una gran herida en la mejilla izquierda.
Después fui trasladado a urgencia al hospital, mi doctor me dijo que debió haber sido cosa del sonambulismo, pero luego me mostró algo que hizo que mi sangre se volviera fría de repente. Él levantó mi camisa y pude ver que tenía una raja cosida con puntos, en la parte donde se deberían encontrar mis riñones.
- De alguna manera perdiste tu riñón izquierdo anoche. No sabemos cómo, lo siento mucho, Mitch- dijo mi médico.
La noche siguiente, alrededor de la medianoche, me desperté y vi un espectáculo verdaderamente horribleMe estaba mirando cara a cara con una criatura con sudadera, capucha negra y una máscara azul oscura, no tenía nariz ni boca pero estaba mirando hacia mí. Lo que más me asustó fue que no tenía ojos, solo se veían unos huecos vacíos de los cuales goteaba sustancia negra.
Agarré la cámara que estaba cerca de la chimenea y tomé una foto. Después la criatura se abalanzó sobre mí y trató de abrir mi pecho con sus garras para llegar a mis pulmones. Me puse a darle patadas en la cara, luego me fui de la habitación, cogí mi cartera y salí corriendo de la casa de mi hermano. Finalmente llegué a un bosque donde tropecé con una roca y caí inconsciente. Cuando desperté en el hospital, mi médico entró en la habitación.
- Tengo buenas noticias y malas noticias, Mitch, la buena noticia es que tus heridas no son graves, y que tus padres te van a acoger.- Suspiré con alivio.-La mala noticia es que su hermano ha sido asesinado por algo, y no se sabe el que a podido ser… lo siento.
Mis padres me llevaron a la casa de Edwin para recoger mis pertenencias restantes, lo cual hice. Al entrar en mi habitación, me asusté, pero luego conseguí calmarme. Agarré mi cámara y luego me detuve en seco. En el pasillo que conduce a mi habitación, vi el cuerpo de Edwin y algo pequeño que yacía junto a él. Recogí ese pequeño objeto y entré en el coche de mi padre, sin mencionar palabra sobre el cadáver de Edwin. Miré lo que había recogido y casi vomitó, se trataba del riñón que me habían robado y estaba mordido por alguien o algo y manchado de un líquido negro.
Ahora viene el origen de esta criatura sin ojos:
Jack era un adolescente que trabajaba en un periódico local. Un día su jefe hizo un anuncio de que Estados Unidos había entrado en La Segunda Guerra Mundial, y Jack al ser estadounidense se dignó a inscribirse en el ejército para luchar por su país
Al poco tiempo se hizo amigo de un inglés llamado Luis, el que también se había alistado allí, ya que su pueblo fue atacado y tenía la necesidad de defenderlo. Jack y Luis se hicieron mejores amigos, y todos lo demás soldados empezaron a llevarse muy bien, hasta se llegaron a llamarse entre ellos hermanos.
Jack y Luis estaban a punto de lanzarse hacia las líneas enemigas, pero al final resulto que el lado enemigo se movió antes que ellos. Gas venenoso fue arrojado alrededor de la base, provocando a Jack que se quedara ciego. Durante el alboroto, Luis recibió un disparo.
Ambos fueron enviados a un hospital a unos pocos kilómetros de distancia. Mientras en el hospital, Jack empezó a llorar por el dolor que sus ojos le estaban causando, por lo que los médicos tomaron una medida drástica y le quitaron los ojos.
Aun estando ciego, Jack se negaba a abandonar a su preciado amigo. Luis estaba siendo atendido por una enfermera llamada Betsy, quién nació en Estados Unidos, se trasladó a Noruega, y fue a ayudar a los soldados heridos de enfermera. Pero desafortunadamente, un día después de esto, la enfermera no pudo sálvale la vida, Luis agarró la mano de Jack pero unos minutos después se soltó, y dio su último aliento en esa cama, como si se fuera a dormir.
Jack quería llorar, pero ya no tenía ojos para poder hacerlo, así que se mordió el labio hasta el punto de que le empezara a sangrar. Luego los médicos apartaron el cuerpo de su amigo y lo llevaron a enterrar, Jack se quedo durmiendo en esa habitación durante unos 3 días.
Al día siguiente el médico le leyó un telegrama de Betsy, diciendo a donde habían enterrado los cuerpos de los soldados muertos, Jack fue allí y encontró el lugar donde fue sepultado Luis, y Jack se despidió y besó la tierra donde estaba enterrado su amigo. Y luego se fue a su casa en Estados Unidos.
Pero sólo más tristeza le esperaba allí. Cuando llegó, su madre lo recibió con lágrimas al ver que él ya no tenía ojos, luego Jack le preguntó si algo más había ocurrido para que estuviera así siendo, ella normalmente tan alegre y llena de tanta energía, entonces ella dijo que Marcos, el hermano de Jack, quien trabajaba en una fábrica había muerto a causa de unas partículas que había impregnadas en el aire. Jack quiso llorar por la pérdida de su hermano, pero y una semana más tarde lamentó la pérdida de su madre, que se dice que probablemente murió por ese gran tristeza
Jack se había quedado solo, ya que su padre murió de tuberculosis cuando él solo tenía cinco años. Y ahora Luis, Marcos y su madre también habían muerto. No había nadie allí para guiar a este hombre ciego, para consolarlo, le ofrecían comida, agua o refugio e incluso alto tan pequeño como un cariñoso abrazo.
Una noche, Jack caminó alrededor de su antigua habitación hasta que llegó a un viejo escritorio de madera donde guardaba un arma, estaba cargada y lista para disparar, por si en algún momento entraba un ladrón y tratara de hacerle daño a él o a su madre. Pero ya ella se había ido, solo había un uso para ese arma ahora, Jack abrió la boca, y apuntó con la pistola en la garganta y apretó el gatillo.
Sus cuerdas vocales y la tráquea fueron destrozadas en un milisegundo. Su cuerpo sin vida calló al suelo, pero para su sorpresa, se encontró aún de pie. El destello repentino de los disparos, le habían provocado algo en su mente que le hizo olvidar todo lo que le había ocurrido antes de su muerte. Estaba confundido en cuanto a por qué lo había hecho. Incapaz de escapar, se quedó en la casa esperando una respuesta, hasta que al ver las fotografías de la Segunda Guerra Mundial, de los soldados y lo demás, le hizo recordar todo de nuevo.
Desde ese día aquel fantasma sin voz ni ojos, ronda por ahí intentando calmar su tristeza de algún modo u otro.
viernes, 6 de diciembre de 2013
domingo, 1 de diciembre de 2013
Hola y gracias por leer nuestras historias pues hoy les traigo otra y espero que la disfruten:
Era un fin de semana, después de una fiesta con mis amigos, me encontraba caminando hacía mi casa, la mayoría de las personas encontraría espeluznante la ciudad cuando es de noche, la brisa soplaba y se oía el crujido de las bisagras, pasé bajo la bandera que se estremecía por el fuerte viento que había. Yo conocía esta ciudad bien, muy bien. No solo tengo el cuchillo en mi sudadera con capucha, también soy fuerte y rápido, así que no tenía miedo.
No estaba preocupado, así que no pensaba en eso, de repente, cuando pasé por una lámpara de la calle, volteé hacia el callejón, el cual frecuentábamos mis amigos y yo, y pude observar como corrían. Decidí echar un vistazo rápido, y pude distinguir una figura en la parte posterior, parecía mirar el contenedor de basura en busca de restos o algo así.No vi el rostro de la persona, sin embargo, escuché claramente el crujido cuando su cabeza se giró a un lado, casi como un búho. Retrocedí, quedé en shock, pero luego, una mueca de diversión estaba en mi rostro y lo encendía como a un farol, era extraño para una persona tener una reacción así después de ver algo tan extraño en un callejón, pero creo que soy raro, en general.
Maldición, los drogadictos por aquí son raros… Me reí de ese pensamiento y continué por la acera, mis botas chocaban contra el cemento y el sonido que hacían parecía tener ritmo. Estaba contento de tener la casa para mí, quería tenerla otra semana, mi madre trabajaba más estos días y eso me dejaba mucho tiempo libre, además de la casa. Es de noche, todo a mí alrededor parecía en llamas, mientras yo flotaba lentamente en el obscuro y confuso mundo de los sueños, ya sabes, esa sensación reconfortante en la cual sabes que estás dormido y te encuentras a la deriva, tranquilo, sientes todo en paz, mientras tus recuerdos pasan como imágenes borrosas en tu mente.
En ocasiones, acompañados de tu corazón acelerado, o de escenas extrañas, que se reproducen como pequeños clips de películas pequeñas. No me maravillo de esto por mucho tiempo, ya que de repente, despierto de mi sueño, me arrastro lentamente, me doy cuenta de que mis ojos están abiertos, me acomodo en la cama, parpadeo un par de veces, mis ojos se ajustan a la obscuridad y, a dormir… Me siento ahí, por un momento, preguntándome ¿Qué me había despertado? Estoy a punto de acurrucarme en las suaves sábanas, pero justo antes de que pueda, un llamativo sonido llama mi atención. Crrrac-ccckk-crackack.
No sonaba muy fuerte así que tenía que estar abajo, seguramente fueron los gatos. Animales estúpidos. Odiaba cuando los gatos me despertaban. Con mi mirada molesta, me dejé caer en mi colchón, el cual rebotó ligeramente, mi mejilla contactó con la almohada, dejándome sentir la frescura en ella, deslicé mi brazo, acomodándome, dispuesto a dormir un poco más.
El sonido no se detuvo, en lugar de continuar en un patrón irregular, continuó de una manera extraña, impredecible, empezó a sincronizarse con mi cabeza, después de unos segundos, comencé a pensar en qué pasaría ¿Acaso era una grieta? ¿Acaso era real? Me senté de nuevo, las sábanas de algodón fino se deslizaron en mis brazos mientras una de mis manos estaba sobre la cama, la otra buscaba ese cuchillo en mi mesita de noche, mis dedos sintieron el mango y se envolvieron alrededor de él. Tal vez estaba exagerando, pero más vale prevenir que lamentar… Estaba pensando en lo que podría ser ese sonido, cuando de repente, me di cuenta de que se escuchaba cada vez más cerca… Tomé el cuchillo con fuerza… Cada vez más cerca… Como si estuviera caminando por el pasillo. Caminando. Abajo. En el pasillo. Esas palabras hacían que más sonidos vinieran a mi cabeza, como si fuera una señal, el lento sonido de esos pasos comenzaba a impregnarse en el pasillo, la que conducía a mi habitación.
No tenía ninguna duda, había alguien en mi casa. Sentí un hormigueo, el cual trepó por la parte trasera de mi cuello, mientras se me ponían los cabellos de punta. Mi visión fue fuerte, mi corazón se disparaba como una ráfaga de adrenalina a través de mi cuerpo, estaba congelado, como una estatua de mármol, sin atreverme a respirar, no podía voltear a los lados por mi propia voluntad, mi ritmo cardiaco es lento, podía sentir cada latido resonando en mi cuerpo, si emitía algún sonido, la persona en el pasillo podría escucharme. Estaba dispuesto a moverme, mientras trataba de perder todos esos pensamientos, que se acumulaban como niebla en mi mente ¿Qué debo hacer? ¿Ejecutar? ¿Ocultar? ¿Emboscar a mi invasor? Salté de la cama, observé la sombra de unos pies en frente de mi puerta, una grieta de luz invadió mi cuarto, sin embargo, había una sombra que lo cubría casi en su totalidad.
Me apoyé en la cabecera de mi cama, los crujidos de las puertas sonaron de nuevo, me congelaron otra vez, mi aliento pasa por mi garganta mientras mis pulmones deciden entrar en una huelga, pensé en que mi corazón seguiría ese ejemplo, sin embargo, mi sangre continuaba recorriendo lentamente mi cuerpo, mientras un sudor frío se apoderaba de mí. El sonido de las bisagras me dieron a entender que mi puerta se abría hasta su máximo alcance, una figura se distinguía en el camino hacia la puerta, mi boca no funcionaba, trataba de gritar… Gritar… Y pedir ayuda… Pero no lograba pronunciar nada, estaba paralizado… No sé cómo fui capaz de pensar tanto, sin embargo, entre ese momento, pude recordar cosas… El callejón El contenedor de basura La cabeza que se asomaba al contenedor Su vestimenta. Era la misma figura que estaba casi enfrente de mí en ese momento, una campana color azul obscuro se levantó sobre él, sus ojos estaban cubiertos por lentes anaranjados, su chaleco color caqui estaba salpicado con sangre, lo cual me provocó otro escalofrió, que me recorrió la espalda.
Entrecerré los ojos, no sabía qué hacer, mi mente seguía intentando gritar, moverme, pero yo no respondía ¿Acaso no podía cumplir esas órdenes? “No”… Fue todo lo que logré decir, entonces mi boca se cerró y se negaba a pronunciar algo más Era un hombre, su rostro estaba completamente oculto, gafas en los ojos, capucha sobre su frente y algo que le cubría la boca y la barbilla. Se acercó, tambaleándose ligeramente, su brazo se movió a un lado dos veces, mientras se acercaba lenta y tenebrosamente hacía mí. Dirigió una mano hacía su rostro, su dedo índice rozó sus labios… "Shhhhh".
Retrocedí contra mi cama, presionando mi espalda con el poste de la cabecera, estaba agarrando el cuchillo con tanta fuerza que mis nudillos se tornaron color blanco, observé el objeto en la mano del muchacho, sentí como mis pupilas se dilataban a causa del miedo, su arma era mucho mejor que la mía, observé la sangre que goteaba de ella, y noté que tenía mucha más habilidad que yo… El intruso elevó el arma, la sangre resbaló de esta y caía al suelo, no podía moverme y mis manos en el cuchillo lo fueron soltando poco a poco, antes de darme cuenta, el cuchillo que sostenía dio un golpe estrepitoso con el suelo de madera. Ahogué un grito, y mis oídos captaron un sonido… ¡No! “Shhhh…” Dijo él de nuevo, mientras continuaba su camino para encontrarme cara a cara en la habitación, después de que su pie contactó el suelo, al mismo tiempo que él terminaba su susurro, observé como su cuello se hallaba en un ángulo inhumano, oía el sonido de sus huesos, sus tendones, un sonido de muerte, una sensación mortal. Yo no escaparía, no me movería, yo esperaría esto.
Mi corazón latía cada vez más rápido, pareciese que iba a romper mis costillas, mi visión se tornaba borrosa, el oxígeno comenzaba a faltarme, pero aún así, mis pulmones negaban a aceptar el aire Su cabeza ahora estaba en un ángulo de 50 grados, se movió ocasionalmente mientras se acercaba, nunca aceleradamente, un paso más, ese cuello parecía agrietarse, producía ese sonido misterioso que ahora me resultaba familiar… “Shhh…” Dijo una vez más, ya encontrándose a un paso de distancia de mí, tomó su arma y la elevó ligeramente, mi visión se debilitaba, mi cuerpo se sentía pesado, sentía mis rodillas temblar, ¡Dios mío! Me sentía sacudido.
Su arma se acercó a mí lentamente, la sentí apoyada en mi estómago, simplemente ahí, me sentí incapaz de mantenerme a mí mismo por más tiempo, en ese momento, sentí una mano en mi hombro, levantándome solo un poco, suficiente para sentir la cuchilla perforando mi abdomen. La agonía enseguida se hizo presente en mí, mi cuerpo se puso rígido, el miedo, la conmoción. Las estrellas de la noche se perdieron de mi vista, mi visión se volvió monocroma, mi mundo giró, lo último que vi fueron un par de zapatos con punta de plata y el charco que se formó con mi propia sangre llegando hacia la punta de los zapatos del intruso…
Y entonces mi mundo se volvió negro y entumecido...
Era un fin de semana, después de una fiesta con mis amigos, me encontraba caminando hacía mi casa, la mayoría de las personas encontraría espeluznante la ciudad cuando es de noche, la brisa soplaba y se oía el crujido de las bisagras, pasé bajo la bandera que se estremecía por el fuerte viento que había. Yo conocía esta ciudad bien, muy bien. No solo tengo el cuchillo en mi sudadera con capucha, también soy fuerte y rápido, así que no tenía miedo.
No estaba preocupado, así que no pensaba en eso, de repente, cuando pasé por una lámpara de la calle, volteé hacia el callejón, el cual frecuentábamos mis amigos y yo, y pude observar como corrían. Decidí echar un vistazo rápido, y pude distinguir una figura en la parte posterior, parecía mirar el contenedor de basura en busca de restos o algo así.No vi el rostro de la persona, sin embargo, escuché claramente el crujido cuando su cabeza se giró a un lado, casi como un búho. Retrocedí, quedé en shock, pero luego, una mueca de diversión estaba en mi rostro y lo encendía como a un farol, era extraño para una persona tener una reacción así después de ver algo tan extraño en un callejón, pero creo que soy raro, en general.
Maldición, los drogadictos por aquí son raros… Me reí de ese pensamiento y continué por la acera, mis botas chocaban contra el cemento y el sonido que hacían parecía tener ritmo. Estaba contento de tener la casa para mí, quería tenerla otra semana, mi madre trabajaba más estos días y eso me dejaba mucho tiempo libre, además de la casa. Es de noche, todo a mí alrededor parecía en llamas, mientras yo flotaba lentamente en el obscuro y confuso mundo de los sueños, ya sabes, esa sensación reconfortante en la cual sabes que estás dormido y te encuentras a la deriva, tranquilo, sientes todo en paz, mientras tus recuerdos pasan como imágenes borrosas en tu mente.
En ocasiones, acompañados de tu corazón acelerado, o de escenas extrañas, que se reproducen como pequeños clips de películas pequeñas. No me maravillo de esto por mucho tiempo, ya que de repente, despierto de mi sueño, me arrastro lentamente, me doy cuenta de que mis ojos están abiertos, me acomodo en la cama, parpadeo un par de veces, mis ojos se ajustan a la obscuridad y, a dormir… Me siento ahí, por un momento, preguntándome ¿Qué me había despertado? Estoy a punto de acurrucarme en las suaves sábanas, pero justo antes de que pueda, un llamativo sonido llama mi atención. Crrrac-ccckk-crackack.
No sonaba muy fuerte así que tenía que estar abajo, seguramente fueron los gatos. Animales estúpidos. Odiaba cuando los gatos me despertaban. Con mi mirada molesta, me dejé caer en mi colchón, el cual rebotó ligeramente, mi mejilla contactó con la almohada, dejándome sentir la frescura en ella, deslicé mi brazo, acomodándome, dispuesto a dormir un poco más.
El sonido no se detuvo, en lugar de continuar en un patrón irregular, continuó de una manera extraña, impredecible, empezó a sincronizarse con mi cabeza, después de unos segundos, comencé a pensar en qué pasaría ¿Acaso era una grieta? ¿Acaso era real? Me senté de nuevo, las sábanas de algodón fino se deslizaron en mis brazos mientras una de mis manos estaba sobre la cama, la otra buscaba ese cuchillo en mi mesita de noche, mis dedos sintieron el mango y se envolvieron alrededor de él. Tal vez estaba exagerando, pero más vale prevenir que lamentar… Estaba pensando en lo que podría ser ese sonido, cuando de repente, me di cuenta de que se escuchaba cada vez más cerca… Tomé el cuchillo con fuerza… Cada vez más cerca… Como si estuviera caminando por el pasillo. Caminando. Abajo. En el pasillo. Esas palabras hacían que más sonidos vinieran a mi cabeza, como si fuera una señal, el lento sonido de esos pasos comenzaba a impregnarse en el pasillo, la que conducía a mi habitación.
No tenía ninguna duda, había alguien en mi casa. Sentí un hormigueo, el cual trepó por la parte trasera de mi cuello, mientras se me ponían los cabellos de punta. Mi visión fue fuerte, mi corazón se disparaba como una ráfaga de adrenalina a través de mi cuerpo, estaba congelado, como una estatua de mármol, sin atreverme a respirar, no podía voltear a los lados por mi propia voluntad, mi ritmo cardiaco es lento, podía sentir cada latido resonando en mi cuerpo, si emitía algún sonido, la persona en el pasillo podría escucharme. Estaba dispuesto a moverme, mientras trataba de perder todos esos pensamientos, que se acumulaban como niebla en mi mente ¿Qué debo hacer? ¿Ejecutar? ¿Ocultar? ¿Emboscar a mi invasor? Salté de la cama, observé la sombra de unos pies en frente de mi puerta, una grieta de luz invadió mi cuarto, sin embargo, había una sombra que lo cubría casi en su totalidad.
Me apoyé en la cabecera de mi cama, los crujidos de las puertas sonaron de nuevo, me congelaron otra vez, mi aliento pasa por mi garganta mientras mis pulmones deciden entrar en una huelga, pensé en que mi corazón seguiría ese ejemplo, sin embargo, mi sangre continuaba recorriendo lentamente mi cuerpo, mientras un sudor frío se apoderaba de mí. El sonido de las bisagras me dieron a entender que mi puerta se abría hasta su máximo alcance, una figura se distinguía en el camino hacia la puerta, mi boca no funcionaba, trataba de gritar… Gritar… Y pedir ayuda… Pero no lograba pronunciar nada, estaba paralizado… No sé cómo fui capaz de pensar tanto, sin embargo, entre ese momento, pude recordar cosas… El callejón El contenedor de basura La cabeza que se asomaba al contenedor Su vestimenta. Era la misma figura que estaba casi enfrente de mí en ese momento, una campana color azul obscuro se levantó sobre él, sus ojos estaban cubiertos por lentes anaranjados, su chaleco color caqui estaba salpicado con sangre, lo cual me provocó otro escalofrió, que me recorrió la espalda.
Entrecerré los ojos, no sabía qué hacer, mi mente seguía intentando gritar, moverme, pero yo no respondía ¿Acaso no podía cumplir esas órdenes? “No”… Fue todo lo que logré decir, entonces mi boca se cerró y se negaba a pronunciar algo más Era un hombre, su rostro estaba completamente oculto, gafas en los ojos, capucha sobre su frente y algo que le cubría la boca y la barbilla. Se acercó, tambaleándose ligeramente, su brazo se movió a un lado dos veces, mientras se acercaba lenta y tenebrosamente hacía mí. Dirigió una mano hacía su rostro, su dedo índice rozó sus labios… "Shhhhh".
Retrocedí contra mi cama, presionando mi espalda con el poste de la cabecera, estaba agarrando el cuchillo con tanta fuerza que mis nudillos se tornaron color blanco, observé el objeto en la mano del muchacho, sentí como mis pupilas se dilataban a causa del miedo, su arma era mucho mejor que la mía, observé la sangre que goteaba de ella, y noté que tenía mucha más habilidad que yo… El intruso elevó el arma, la sangre resbaló de esta y caía al suelo, no podía moverme y mis manos en el cuchillo lo fueron soltando poco a poco, antes de darme cuenta, el cuchillo que sostenía dio un golpe estrepitoso con el suelo de madera. Ahogué un grito, y mis oídos captaron un sonido… ¡No! “Shhhh…” Dijo él de nuevo, mientras continuaba su camino para encontrarme cara a cara en la habitación, después de que su pie contactó el suelo, al mismo tiempo que él terminaba su susurro, observé como su cuello se hallaba en un ángulo inhumano, oía el sonido de sus huesos, sus tendones, un sonido de muerte, una sensación mortal. Yo no escaparía, no me movería, yo esperaría esto.
Mi corazón latía cada vez más rápido, pareciese que iba a romper mis costillas, mi visión se tornaba borrosa, el oxígeno comenzaba a faltarme, pero aún así, mis pulmones negaban a aceptar el aire Su cabeza ahora estaba en un ángulo de 50 grados, se movió ocasionalmente mientras se acercaba, nunca aceleradamente, un paso más, ese cuello parecía agrietarse, producía ese sonido misterioso que ahora me resultaba familiar… “Shhh…” Dijo una vez más, ya encontrándose a un paso de distancia de mí, tomó su arma y la elevó ligeramente, mi visión se debilitaba, mi cuerpo se sentía pesado, sentía mis rodillas temblar, ¡Dios mío! Me sentía sacudido.
Su arma se acercó a mí lentamente, la sentí apoyada en mi estómago, simplemente ahí, me sentí incapaz de mantenerme a mí mismo por más tiempo, en ese momento, sentí una mano en mi hombro, levantándome solo un poco, suficiente para sentir la cuchilla perforando mi abdomen. La agonía enseguida se hizo presente en mí, mi cuerpo se puso rígido, el miedo, la conmoción. Las estrellas de la noche se perdieron de mi vista, mi visión se volvió monocroma, mi mundo giró, lo último que vi fueron un par de zapatos con punta de plata y el charco que se formó con mi propia sangre llegando hacia la punta de los zapatos del intruso…
Y entonces mi mundo se volvió negro y entumecido...
viernes, 29 de noviembre de 2013
Slenderman experimento 84-B
Hola amigos les traigo una de las muchas historias de slenderman creo que esta les va a gusta porque es una historia diferente, trata de que slenderman fue una persona normal pero que hicieron un experimento que lo transformo aquí les de jo la historia espero que les gusté adiós:
Todos ustedes tienen vida, tienen esperanza, yo ya he perdido estas cosas por culpa de un demente, el es el único que en verdad es malo, no yo. El se robo mi vida, mi esperanza, mi todo; me dejó en la putrefacción después de hacer su maldito experimento. Me dio la bienvenida con los brazos abiertos, me prometió una nueva vida, mejor que la que había vivido antes, el me mintió, se robo todo de mi.
Todavía recuerdo el día, yo era un joven sano recién salido de la escuela preparatoria, el sol brillaba, como sea, todos me odiaban, sentía como todos me juzgaban. Mi camino a casa durante el último día de la escuela fue un infierno, como de costumbre, los chicos que pasaban en sus autos gritaban cosas como: maricón o ya toma una ducha; ¿por qué me odian tanto?
Un pensamiento paso por mi mente, estos tipos poco a poco me mataran de todos modos, ¿por qué no hacerlo rápido y sin dolor?, estaba cegado por el dolor, si hubiera sabido entonces lo que se ahora nunca me hubiera atrevido a tomar esa cuerda de mi sótano, ¿pero donde hacerlo?, no
en mi casa, yo odiaba a mi madre, pero no lo suficiente para causarle un trauma.
Así que salí de casa y me dirigí a la ciudad a la parte más remota y dentro de un callejón me propuse a acabar con mi vida.
-Joven, ¿qué estás haciendo?
-Ponerle fin a esto- respondí
-¿Estás loco?, ven, ven conmigo, creo que te puedo ayudar
-¿Ayudarme?, si no eres más que un anciano, déjame morir en paz
-Ahora no puedo hacer eso- Dijo con voz ronca y me agarro del brazo-Ven.
Cuando luché tiró con más fuerza. Me caí y el volvió a sujetar mi mano y rápidamente me arrastro dentro de un edificio y cerró la puerta detrás de nosotros.
-Joven, creo que puedo ayudarte, se cómo te sientes, por favor escúchame
-Maldito seas, muy bien, pero date prisa
-Una vida es algo precioso, pero que dirías si yo te ofreciera una vida nueva y totalmente gratis.
-Yo diría que donde coño me inscribo
-Bueno, he estado haciendo una investigación sobre la anatomía humana y después de unos cuantos experimentos, creo que he dominado la manipulación de la forma humana. Creo que puedo convertirte en cualquier cosa o cualquier persona que desees. Claro, bajo ciertas circunstancias.
-¿Cómo cuales?
Saco una hoja de papel – Bueno, primero que nada firma aquí
-¿Qué pasa si no quiero?
-Bueno, en eso radica la segunda circunstancia, tu no tienes elección
-¿Qué?
-Ya me has oído mi querido amigo – Saco una jeringa con un liquido verde – Ahora quieto
Trate de correr, trate de gritar, pero él me tomo y me enterró la aguja en el cuello, entonces todo se volvió negro.
Me desperté en una cámara de vidrio y por alguna razón estaba vestido de traje segundos después de que me desperté, el entro en la habitación con una bata de laboratorio.
-Hola, mi amigo, ¿Tuviste una buena siesta?
-¿Dónde estoy?
-Eso no es de tu interés, todo lo que tienes que hacer es sentarte y dejar que me haga cargo de todo el trabajo
-¿Qué me estás haciendo, psicópata?, te voy a matar
-Hijo, no te tengo miedo, tú te vas a quedar ahí mientras yo hago historia
-¿Historia?
-Si, cundo por fin logre hacer una transformación de todo el cuerpo en ti
Toco un interruptor y comenzó a hablar en un micrófono – Probando, probando, bueno ahora comenzaremos con el experimento 84-B
-¿Qué demonios estás haciendo?
-Los signos vitales del sujeto, parecen ser normales, su frecuencia cardiaca se ha disparado, sin embargo, la actividad cerebral es alta y los niveles de insulina son normales
-¡Déjame ir!
-Listo para comenzar con el experimento – Se dio la vuelta para accionar una palanca-
Activando primer nudo – Un rayo de energía comenzó a perforar mi cuerpo, rompiendo mi ser en pedazos, no podía gritar, mi visión se torno borrosa y de pronto estaba ciego – La apariencia del sujeto empieza a deformarse, activación del segundo nudo – El dolor aumento, sentí como mi boca y mis ojos se cerraban – La cara del sujeto esta completamente transformada, activación B – Una sirena sonaba, "ERROR, ERROR", el grito – ¡No!, su rostro y las extremidades no se han desarrollado plenamente, tengo que abortar el experimento.
Lo ultimo que escuche fue un gran estruendo.
Me desperté, esta vez en los escombros de aquel lugar, apenas podía ver, era como si una
pantalla de algún tipo me tapara los ojos. Sentía la boca como si hubiera sido cosida con aguja e hilo, no podía respirar, puesto que mi nariz se había cerrado también, pero de alguna manera
no tenía la necesidad de respirar.
Me levanté, mis brazos y piernas se sentían extraños, me tomo casi un minuto volver a tomar el control sobre ellos, entonces comencé a caminar entre los escombros. Un ordenador destrozado yacía al lado de un pie desmembrado, un rastro de sangre me llevo a un pasillo y después a una puerta, podía oír ruidos, abrí la puerta y vi a un policía levantar algunas cosas, se dio la vuelta y me vio, grito y salió corriendo.
Yo trate de gritarle que se detuviera, pero no pude hablar, así que lo perseguí, a medida que corría sentí como si mis piernas estuvieran cambiando, como si estuvieran creciendo mientras me movía. Pronto alcance al policía y trate de tomarlo del hombro, un tentáculo salió de mi y le atravesó el pecho, me maldijo y cayo. “¿Qué coño ha pasado?” pensé. Mire al cadáver, un
agujero enorme se encontraba en su pecho, no lo pude ayudar.
Continuara...
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